Fuente: TUPAC AMARU
-Un poco de historia: hablemos desde el incidente con Morales, ¿cuáles fueron las modificaciones, la alta exposición mediática de Milagro, o de todo el grupo de Tupac, las críticas, el amarillismo en la prensa?
Bueno, sí, son varias cosas. En primer lugar, lo de Morales fue una coyuntura. Una coyuntura donde Morales, queriendo asemejarse a Lilita Carrió lanzó cualquier exabrupto sobre la Flaca (la Flaca es Milagro Sala, su compañera). Lo hizo porque estaba jugando, entre otras cosas, la interna Radical. Parece que está de moda posicionarse en la sociedad, puteando a Kirchner. Entonces, digamos que la usó como pretexto a Milagro. ¿Por qué digo que la usó como pretexto? Porque dos o tres huevazos, en donde Milagro no tuvo nada que ver, hizo lo que hizo a sabiendas que mentía.
Pero, casualidad o no, la prensa de Buenos Aires levanta la acusación de Morales y Milagro, la Tupac, y todos nosotros, pasamos a ser una especie de asociación ilícita, donde se habla de bandas armadas, del manejo de la droga, de que la Tupac tiene aterrorizada a la sociedad jujeña. Un operativo duro. Prendíamos en televisor y nos veíamos acusados con tal brutalidad que no fue fácil, al principio. Nada fácil.Bien. Pero yo creo que en poco tiempo se dio vuelta la tortilla, porque la gente empezó a caer en la cuenta de lo que es Milagro. Y que ella no busca estar expuesta, que la cabeza de Milagro y la Tupac no está puesta en los medios de comunicación ni en las denuncias, ni en salir en un programa de televisión. Lo nuestro, de Mila y todos los que somos Tupac, es que estamos en el tema de construcción de viviendas, en los polideportivos, en ver cómo hace obras para los chicos, para los discapacitados. Por ejemplo, acabamos de inaugurar el CEMIR, que es un Centro de Atención y Rehabilitación que es ejemplo en el NOA por las características que tiene. Eso está en la cabeza de la Tupac. No en los medios de comunicación. Pero a raíz de esas denuncias surrealistas de Morales empezó a conocerse la verdad. Que nosotros somos un grupo humano, una organización, que tiene otras características distintas y que es una de las pocas, si no es la única en Argentina que no sólo hace lo que no hacen muchos. Y además que cumple lo que promete. Tres mil quinientas viviendas, dieciocho polideportivos, un centro de rehabilitación, un parque acuático, un centro de salud modelo y ejemplar, una escuela primaria y secundaria para determinadas áreas educativas. Eso no es poco en el término de tres o cuatro años. No estoy hablando en el lapso de diez años.O sea, en Jujuy hemos hecho mucho más que cualquier gobierno en los últimos 20 años, en un lapso de tres o cuatro años. Además, no solo en Jujuy, porque ahora estamos construyendo viviendas en Mendoza, en el Chaco. Ahora vamos a empezar a construir en la provincia de Buenos Aires, o sea que nos estamos expandiendo. Y ése espíritu creo que no puede ser frenado. Al contrario, creo que las provocaciones de Morales han potenciado las manifestaciones concretas de lo que es Milagro. Por ejemplo, hemos recibido una invitación del MAS para estar en el acto de cierre de campaña de Evo, en Santa Cruz de la Sierra, que es el lugar más complicado, donde existe una derecha dura. Ahí estuvimos especialmente invitados.
Creo, eso está demostrando que el reconocimiento a la Tupac no solo es nacional si no que traspasa las fronteras. Eso tiene mucho que ver con las características de la organización que es el revivir la espiritualidad andina, de la cultura de los pueblos originarios. Toda esta complejidad, a raíz de estas historias, se está conociendo, estudiando, investigando. Y creo que en definitiva, nos ha servido para presentarnos ante la opinión pública. Cosa que no queríamos hacer porque nuestra metodología es el trabajo, no la exposición pública ni los medios de comunicación. Pero se hizo y creo que la verdad está surgiendo.
-Ahora la Tupac está en el Chaco, en Corrientes, en el Gran Buenos Aires, en Río Negro, en Mendoza, en Tucumán. ¿Cómo se viene manejando este crecimiento casi desaforado, ese nuevo fenómeno, digamos?
Bueno, lo estamos haciendo con mucho esfuerzo porque, paradójicamente, y ahí tenemos una de las consecuencias de la verdad que decía antes: muchísima gente se acerca para conocer la Tupac y para empezar a trabajar con la Tupac. Nosotros hemos tenido que hacer un esfuerzo para atender todas esas demandas. Están apareciendo focos tupaqueros en todo el país, donde nosotros menos lo esperábamos. El 11 de diciembre, Milagro estuvo en la Universidad de Quilmes y hubo mucha gente de barriadas populares que fueron a escucharla, a aplaudirla y a decir que quiere trabajar con nosotros.Y compañeros que no esperábamos, gente joven sobre todo, esa es otra característica, la juventud se está acercando y ve a la Flaca y a la Tupac como referencia de un fenómeno nuevo en la Argentina. Fenómeno que para mí implica a la nueva izquierda. Digo nueva izquierda porque no tiene nada que ver con las construcciones tradicionales, si no que es una nueva construcción que no se basa tanto en lo estrictamente ideológico –y no es que se deje lo ideológico de lado- sino en la construcción social y material. En el trabajo, dicho de otra manera. Me hace acordar a una frase de Goethe, el poeta alemán, que decía que el principio era la acción. Bueno, para la Milagro, en el principio, el medio y el final de su desarrollo, está la acción. La acción concreta.
-¿En este momento la Tupac tiene cuadros para bancarse un crecimiento?
Sí, tiene cuadros. Y en esa acción que te comento, a partir de la experiencia cotidiana, no solo de construcción de vivienda, si no de socialización, porque este es un marco de socialización que va creciendo en complejidad, en ese marco se va construyendo la ideología y los cuadros. Pero las necesidades son crecientes. Y nosotros trabajamos para satisfacer necesidades. Y partimos de conceptos elementales. Dentro de esas necesidades elementales, ahora está apareciendo un espacio de cierta complejidad, como es la cultura, la comunicación y estamos viendo cómo respondemos a esas nuevas exigencias que se presentan. Porque nosotros trabajamos mucho y desde el comienzo con necesidades materiales concretas. Donde hay un nicho de necesidad estamos nosotros.
-¿Esa es la estrategia?
Esa es la estrategia. Sí. Y a partir de eso creemos que la cosa viene bien para los próximos años. Y algo más. Estamos haciendo un trabajo de acercamiento a una red de todas las organizaciones sociales que podamos, que compartan este punto de vista, para crear una plataforma sólida para ayudar a la transformación del mundo del mañana. No somos los dueños de la verdad. Somos la Tupac. Y como bien dijo Milagro, no queremos que todos vengan a la Tupac. No queremos que dejen sus banderas. La unidad se hace en la complejidad de los movimientos sociales, no en el unicato. La síntesis, la da el tiempo y el trabajo. Así de simple.
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